En el post de hoy vamos a descubrir la segunda ciudad en población de La Rioja: Calahorra. Sigue leyendo y descubre qué ver en Calahorra.
Tabla de contenidos
Dónde está y cómo llegar
Calahorra se encuentra en la comarca del mismo nombre formando parte de la comunidad de La Rioja en su extremo este, más conocida como Rioja Baja.
Para llegar a Calahorra podemos hacerlo de las siguientes formas:
- Autopista AP-68 tomando la salida número 15.
- N-232
- LR-134 enlazando con la NA-653.
Breve historia de Calahorra
Calahorra se encuentra situada en un cerro entre los ríos Cidacos y Ebro, lo que hacía de ella un muy buen punto estratégico.
En torno al siglo IV a.C. se tiene constancia de que se comenzase a habitar en la zona, que fue conquistada por los romanos en el siglo II a.C. Calagurris, denominación de la época de Calahorra, es escenario de diferentes batallas en siglos sucesivos. Y con la caída del Imperio Romano se viven momentos de inestabilidad.
Calahorra pasa a manos visigodas. Tras ello, después de que el rey visigodo don Rodrigo pierda la batalla del río Guadalete, pasa a formar parte de la España islámica.
En el siglo X vuelve a haber momentos de inestabilidad en el territorio, pues esta zona es reconquistada por el rey de Pamplona Sancho Garcés, pero cambiará varias veces de manos. Esto hará que la localidad sufra destrucciones y pérdida de población. Todo esto terminará en el año 968 con el visir-caíd del califa cordobés Al-Hakam II, quien repoblará y reconstruirá Calahorra. Vendrán años de crecimiento que, sin embargo, volverán a verse nuevamente interrumpidos por la desintegración del califato de Córdoba. El rey pamplonés García Sánchez III consigue tras ganar la contienda hacerse con la zona de forma definitiva, incorporándola al reino de Pamplona-Nájera.
Durante la Edad Media, Calahorra es frontera entre los reinos cristianos y los musulmanes y entre los reinos de Castilla, Pamplona y Navarra.
En 1076 Alfonso VI incorpora la localidad a Castilla, tras el asesinato del rey Sancho Garcés, pero al contraer matrimonio Alfonso I, rey de Aragón y Pamplona con la reina Urraca de Castilla en 1109, se extiende su reino por estas tierras y las de la zona orientas de Castilla. A su muerte Alfonso VII de Castilla recupera Calahorra y firma la Paz de Calahorra en 1137.
En 1366 tiene lugar la coronación de Enrique II de Trastámara.
En el año 1466 el conde de Fox invade Castilla y ocupa Calahorra, pero los propios vecinos terminan expulsando a los invasores.
La Edad Moderna llega con varias crisis demográficas, debido a diferentes enfermedades y hambrunas. Los habitantes de Calahorra viven mayoritariamente de la agricultura en esta época. En el siglo XVIII. Aunque poseen algunas industrias, la actividad es muy escasa.
En el siglo XIX, y aunque no participaron directamente en los conflictos que hubo, si que se vieron afectados y supuso un empobrecimiento de la población. Además, fueron saqueados por las tropas francesas en 1813.
Tras la muerte del Fernando VII en 1833, teniendo como sucesora a su hija Isabel y con parte del pueblo no siendo partidario de una mujer en el trono, comienzan las sublevaciones. Estos sucesos y la guerra posterior llegan Calahorra, donde hay un alzamiento en 1833. Es esta misma década de los años 30 cuando llegan las desamortizaciones, que afectan muy directamente a la localidad porque es cabeza de obispado y sede de diferentes órdenes religiosas. Durante este siglo se desarrollan las industrias conserveras, teniendo en 1890 casi la mitad de las fábricas del país. Aún así, la agricultura sigue siendo su principal actividad económica.
Para comenzar el 1900, una desgracia sacudió a la ciudad: el incendio de la catedral de Santa María. Pero a pesar de esto, el crecimiento económico de Calahorra marcó el inicio del nuevo siglo, siendo referente nacional en la industria conservera. La sublevación militar que dio paso a la Guerra Civil y posterior dictadura de Franco, tuvo un éxito rápido en Calahorra.
La llegada de la democracia trajo a Calahorra el impulso para transformarse, haciendo de ella con el paso de los años una ciudad plural y diversa, dotada de todos los servicios esenciales.
Qué ver en Calahorra
Catedral de Santa María
Construida sobre el lugar de martirio de los patronos de Calahorra, los santos Emeterio y Celedonio. Se comenzó a finales del siglo XV y sus obras duraron más de 200 años. El hecho de haber invertido tanto tiempo en su terminación ha hecho que en la catedral se puedan observar diferentes estilos artísticos, pero que no deslucen entre ellos.
Es de cruz latina con tres naves, siendo la central más alta y ancha y posee dieciséis capillas.

Iglesia de San Andrés
Su origen es del siglo VII y fue reformada en el siglo XVI. De esta reforma tenemos un edificio gótico, sin rastro de estilos anteriores. En el siglo XVIII se le añade un nuevo tramo, así como una cabecera nueva.
Su planta tiene dos partes que están bien diferencias entre sí, donde la primera se diferencia de la segunda por bóvedas de aristas. En cuanto al exterior destacar la portada de estilo gótico-florido que fue construida aprovechando materiales del antiguo edificio.

Iglesia de Santiago
Construida para reemplazar el templo antiguo a principios del siglo XVII.
En su fachada se combinan los estilos barroco y neoclásico, siendo su interior barroco. Es de planta en cruz latina con tres naves de una misma altura y capillas en los contrafuertes y en los brazos del crucero.

Iglesia de San Francisco
Construida a finales del siglo XVII en mampostería encadenada en ladrillo. Es de estilo barroco de una sola nave que tiene cuatro tramos, crucero y cabecera rectangular.
Actualmente no hay culto. Acoge los Pasos de la Semana Santa, que es fiesta de Interés Turístico Nacional.
Monasterio de San José
Fue fundado en 1589. LA fachada es de piedra en forma de arco de triunfo. Lo más importante y valioso se encuentra en su interior: el relieve del Altar Mayor y un Cristo atada a la columna.

Santuario del Carmen
Templo carmelita que se fundó en 1603 y ampliado en la segunda mitad del siglo XVIII.
Es de tres naves de altura desigual, crucero y cabecera rectangular. Es retablo es de estilo clasicista.
Humilladero
Construido en el siglo XVI para dar la bienvenida a los peregrinos que llegaban a Calahorra. Es de estilo plateresco.
Fuente de los Trece Caños y Lavadero
Esta fuente monumental neoclásica que podemos encontrarnos al entrar en la ciudad se terminó de construir en 1872. A escasos metros encontramos el antiguo lavadero.
Restos arqueológicos
En diferentes puntos de Calahorra podemos encontrar restos arquelógicos de interés. Estos son: el Sequeral, las murallas, el circo romano, el acueducto, la presa, la clínica, las cloacas y el arco de San Andrés.

La judería
Durante la época medieval en Calahorra hubo una importante judería con su propio recinto amurallado y sinagoga, además de propia organización jurídica y social. A día de hoy podemos pasear por lo que queda de este barrio.
Museo de la Verdura
El Museo de la Verdura consta de seis espacios expositivos que cuentan al visitante todo lo que debe saber sobre los productos de la huerta calagurritana, su transformación, diferentes formas de conservación y degustación.
El antiguo convento de San Francisco alberga este espacio museístico.

Museo de la Romanización
Un millar de piezas distribuidas en cinco salas nos lleva a recorrer diferentes aspectos de la vida romana entre los siglos IV a.C. a IV d.C.
El museo está situado en la Casa del Millonario, un palacete modernista de 1930.
